Erignathus barbatus

Erignathus barbatus (Erxleben, 1777) Gill, 1866

3-Agosto-2017.
Cautividad. Europa, Alemania, Renania del Norte-Westfalia, Bonn, Museo de Investigación Zoológica Alexander König.
Coordenadas: 50°43′19″N, 7°06′49″E.
Leg: Isidro Martínez. Det: Museum König.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Chordata.
Clase: Synapsida.
Orden: Carnivora.
Suborden: Pinnipedia.
Familia: Phocidae.
Género: Erignathus.
Especie: Erignathus barbatus.

La foca barbuda es la única especie del género Erignathus. Mide hasta dos metros y setenta centímetros de longitud, y de forma sorprendente, las hembras son más grandes que los machos, al revés que en las demás focas. Su peso varía grandemente según la estación del año, llegando hasta un máximo de cuatrocientos treinta kilos. Su cabeza es proporcionalmente pequeña con respecto al cuerpo, en comparación con otros tipos de focas. La característica más destacable de la foca barbuda son los larguísimos bihotes blanquecinos que emergen de su morro, así como sus aletas muy cuadradas. Ambos pares de aletas poseen uñas puntiagudas y sobresalientes. Su pelaje es bastante uniforme, de gris claro a pardo oscuro, con la espalda más oscura que el resto del cuerpo. Ocasionalmente aparecen manchas claras en el dorso y los flancos. Su cara, y a veces también sus aletas, suelen ser de color herrumbroso intenso. Los cachorros, que al nacer miden un promedio de un metro y treinta centímetros, poseen un pelaje grisáceo y una banda oscura sobre los ojos rodeada por marcas blancas en las mejillas y las cejas, dándoles un aspecto enmascarado. La foca barbuda y las focas monje son las únicas focas con dos pares de mamas.

Se encuentra en el Océano Glacial Ártico, donde sus poblaciones se dividen en dos subespecies: la atlántica y la del Mar de Bering. Llega al sur hasta la isla de Hokkaido en Japón, aunque en raras ocasiones ejemplares divagantes se alejan de su zona habitual y llegan tan al sur como hasta Portugal. Prefiere las aguas glaciales someras de menos de doscientos metros de profundidad, densamente cubiertas de placas de hielo. Generalmente los adultos son solitarios, ocupando cada uno su bloque de hielo particular. A menudo se dejan llevar a la deriva sobre sus bloques de hielo, cubriendo así grandes distancias, por lo que su migración es involuntaria y dependiente de las corrientes. En verano, cuando el hielo es más escaso, puede reposar sobre playas de gravilla y rocas, pero prefieren con mucho las placas de hielo si están disponibles, y no están ocupadas por morsas. Son de actividad diurna y pasan gran parte de su tiempo buscando alimento. La mayor parte de su dieta está formada de moluscos y crustáceos, aunque también consumen peces de fondo. Uno de estos peces, la platija americana, le transmite el nemátodo Pseudoterranova decipiens, que vive exclusivamente en el estómago e intestino de la foca barbuda y no en otras especies de focas. Sólo durante la época de cría se agrupan en colonias, durante esta temporada los machos producen gran variedad de sonidos que pueden servir tanto de cortejo para las hembras como de advertencia a machos rivales. Los machos se reproducen con cuantas hembras pueden y las abandonan inmediatamente tras la cópula, sin otorgar cuidado alguno a sus cachorros. Tras una larguísima gestación (de once meses), las hembras paren su única cría en la siguiente temporada reproductiva, de mediados de marzo a mayo, sobre una placa de hielo. El cachorro es destetado hacia las tres semanas de edad. Las hembras alcanzan la madurez sexual entre los tres y los ocho años, y los machos a los seis o siete años. Puede vivir hasta treinta y un años.